Hoy #Experiencia Guarda14 te lleva de paseo a un maravilloso lugar: San Ignacio Estancia Andina

Entre cerros colorados, con agua pura de vertiente, sombra de árboles añosos y aire fresco de montaña, se encuentra San Ignacio Estancia Andina que espera al visitante con todo su encanto. Vení a conocerla junto a Mayra Tous.

“Sentir la montaña en su máxima expresión” es el lema guía del emprendimiento familiar mendocino, que brinda servicios de turismo rural regenerativo para personas activas o con ánimo de relax.

San Ignacio Estancia Andina invita al visitante a disfrutar de un lugar único, conectarse con la naturaleza y aprender nuevas formas de generar impactos positivos ambientales y sociales en nuestro entorno. Vení a conocerla.

Posada boutique

La posada está equipada con las comodidades de un hotel, pero en el medio de la montaña. Dispone de 4 habitaciones con baño en suite, amplios espacios comunes que invitan a compartir y rincones naturales por descubrir. Un detalle no menor es que cada mueble y equipamiento son reciclados y han sido arreglados y pintados por los propietarios.

La estancia está equipada con energía solar, calefón solar y métodos de eficiencia energética. El agua proviene de su propia vertiente y posee sistemas de eficiencia hídrica. Al tener una política de basura cero, se consume sin embalajes y a productores locales, separando y reciclando los residuos. También se crían llamas como animal ecológicamente correcto de zonas áridas.

Experiencias en la naturaleza

San Ignacio Estancia Andina, ofrece experiencias de turismo rural regenerativo. Rural, porque su entorno es completamente natural y enseña la vida de campo y sus tradiciones; y regenerativo porque su objetivo es revalorizar el ambiente pedemontano, mejorando la flora, fauna y uso del suelo.

Algunas de las experiencias inolvidables en San Ignacio son las cabalgatas y el trekking, recorriendo las montañas, descubriendo vertientes de agua y divisando Mendoza desde lo alto. El visitante podrá avistar diferentes especies de la fauna autóctona como águilas moras, cóndores y zorros entre otros; y también conocer la flora del lugar y sus propiedades.

También es posible realizar salidas grupales de mountain bike y runners; clases de yoga; educación ambiental; talleres de cocina regional y eventos corporativos.

Pasión por la cocina

En materia de gastronomía, en San Ignacio la comida se convierte en la pausa necesaria para recobrar energías, el momento de compartir la mesa y disfrutar de la compañía.

Se pueden degustar los mejores platos de la región cocinados al fuego, disco, parrilla o paila… siempre acompañados de buenos vinos mendocinos.

En el desayuno, disfrutarás de infusiones calientes, huevos caseros, panes y mermeladas de elaboración propia junto con cereales, yogures y frutas de la región. Para el almuerzo, todo al fuego: los platos típicos de la región como asado argentino, chivo a la llama, pollo al disco, acompañados de verduras y ensaladas de su huerta.

Luego, una merienda con pastelería regional, alfajores caseros y frutas te ayudará a relajarte y prepararte para vivir los mágicos atardeceres en la Estancia. Y al finalizar el día, al calor de la chimenea o alrededor del fogón bajo las estrellas, entre picada y copas de vino, fluyen las anécdotas antes de una deliciosa cena casera.

¡Importante!

La atención es personalizada, por ello los propietarios de la Estancia se reúnen con los visitantes en un punto de encuentro previo (normalmente el Ecoparque de Mendoza) para subir juntos hacia Los Andes. Se recomienda traer abrigo, calzado cómodo cerrado, sombrero, pantalones largos y set de mate.

En detalle

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