Bruno Ferrari: la combinación de vino y cerveza y una franquicia con dos locales en Mendoza

Bruno Ferrari ostenta el récord de ser el brewmaster recibido más joven de Argentina. - Gentileza
Bruno Ferrari ostenta el récord de ser el brewmaster recibido más joven de Argentina. - Gentileza

El maestro cervecero y uno de los tres hermanos propietarios de Berlina habló con Los Andes acerca de la expansión de su negocio con un nuevo local, su relación con Mendoza y más.

Aunque muchas veces se plantean al vino y la cerveza como antagonistas, Bruno Ferrari, quien ostenta el título de brewmaster más joven del país, logró combinarlos en Berlina. Fiel a su espíritu libre y al de su proyecto, uno de los más premiados del país, el maestro cervecero sumó el título honorario de hacedor de vinos y salió al mercado con una línea de, por ahora, tintos nómades, que eligieron a Mendoza como su primer terruño.

Pero su relación con la Tierra del Sol y del Buen Vino no termina ahí. La provincia se convirtió en la primera en contar con dos bares de Berlina a partir del exitoso sistema de franquicias con el que Bruno y sus hermanos decidieron expandir la cervecería nacida en Bariloche. Es que hace unos días inauguraron Berlina Arístides, el segundo bar que se suma al ubicado en Peatonal Sarmiento.

Aprovechando su paso por Mendoza, Bruno Ferrari habló con Los Andes acerca de la creación de su vino, su vínculo con la provincia y la expansión de su negocio.

Berlina presentó su nuevo local en Arístides. - Gentileza
Berlina presentó su nuevo local en Arístides. - Gentileza

- ¿Cómo surgió la idea de combinar la cerveza con el vino?

- En el año 2001 me recibí en Alemania, más precisamente en Berlín en la VLB-Technische Universitat, de maestro cervecero. Viví tres años en ese país, trabajando allá. De ahí me fui un año a Nueva Zelanda a hacer vinos, donde estuve trabajando en los viñedos y la bodega. Después pasé 18 años sin hacer nada relacionado a la vitivinicultura, pero siempre lo tuve en mi sangre. Es una bebida que me encanta y tenía ganas de elaborarla. Así empezamos a elaborar nuestra línea, porque en Berlina somos un espíritu libre y en constante creación. Eso incluye el vino, un destilado al estilo grapa, un vodka, las salsas con birra o sal con cerveza. Siempre involucrando lo que yo sé hacer, las espirituosas.

Para mí es constante ir por cosas nuevas y la empresa se toma los atributos de crear constantemente, porque tiene el aval de la marca y ya tener varios años en el mercado con productos de calidad.

Para hacer el vino no estoy solo, porque como en todo hay que ir aprendiendo. Trabajo con Mariano Genzel, que es un muy buen enólogo y para mí va a ser uno de los talentos de la Patria, él es mi brazo ejecutor, porque sé qué vino deseo y quiero hacer, pero él lo elabora y me va enseñando.

- ¿Cómo es tu vínculo con Mendoza?

- La provincia es un lugar súper especial por sus paladares exquisitos. Los mendocinos están muy entrenados en la parte gustativa y olfativa, por eso estoy convencido que es un lugar donde respetan mucho nuestros productos. Por eso es la primera ciudad en la que tenemos dos sucursales y creemos que hay lugar para más también. El mendocino, así como es un muy buen hacedor y bebedor de vinos, he descubierto que les gusta mucho la birra. También es un lugar al que me encanta ir, por más que mis vinos sean nómades y no tengan un lugar fijo.

- ¿Por qué eligieron el modelo de franquicia para expandir Berlina?

- Estamos convencidos de que la mejor manera de contar nuestro cuento es brindándonos. Eso lo logramos teniendo nuestra propia casa, nuestro templo. Eso lo logramos con las franquicias y juegan un rol muy importante porque podemos ser muy genuinos para compartir lo que hacemos y mostrar nuestro espíritu.

Si bien producimos todo en Bariloche, en nuestra fábrica de Colonia Suiza, movemos todos los productos al resto del país. Creemos que es como tomar leche de la teta de la vaca, con naturalidad y comodidad. Y, personalmente, me encanta el modelo de franquicias para contar nuestro cuento. En la experiencia Berlina buscamos que sea una marca federal y que la gente se vaya de nuestros bares un poco más feliz de lo que entraron.

Mariano Genzel y Bruno Ferrari, los hacedores del vino de Berlina. - Gentileza
Mariano Genzel y Bruno Ferrari, los hacedores del vino de Berlina. - Gentileza

El nuevo Berlina Arístides

El nuevo bar ubicado en la Avenida Arístides Villanueva cuenta con 12 canillas, 10 de las cuales estarán dedicadas a estilos de cerveza que rotan constantemente, para mantener la variedad y el interés del público. Además, hay una canilla dedicada al Gin Tonic de Berlina, galardonado en 2022 como el segundo mejor gin de autor del país, y otra especial para la Sidra 100% orgánica, elaborada con manzanas del valle de Río Negro. Ambas opciones son aptas para personas con celiaquía.

El espacio funciona en una antigua casa restaurada cuyos muros, pisos calcáreos y cielorrasos originales conviven con las nuevas instalaciones y el equipamiento cervecero de última generación, con cámara de frío vidriada y barriles a la vista. Cuenta con lugar para 160 personas, entre el salón interior y la vereda. El horario de atención es todos los días de 18 a 3.

En cuanto a la gastronomía, la carta está diseñada para acompañar las cervezas y vinos con una amplia variedad de papas, picadas y nachos; lomos, pinchos a la parrilla, pizzas y hamburguesas de estilo casero. Además, todos los platos pueden acompañarse con “Ketchup IPA” y “Barbacoa Stout”, también elaborados por la marca.

COMPARTIR NOTA